A casa

La fábrica de humo

Miguel Ángel Chazarri 13/03/2020

Lo que es la vida. Hace un rato, Sergio Ramos, Joaquín y el delegado Rodríguez Fontanilla se comían a besos antes de empezar el Betis-Real Madrid. Hace un rato, el Villamarín estallaba de alegría con el gol de Tello y comenzaban las cavilaciones prederbi: ¿a quién le viene mejor el partido?  ¿Armará el taco Fekir en Nervión? ¿Acusará el Sevilla su duelo ante la Roma? ¿Mejor coger al Betis alegrito para darle otra estocada?

Un virus escurridizo ha podido con todo y ha demostrado, una vez más, nuestra fragilidad. Al principio, todo pareció desmedido. ¿A nosotros nos va a tocar eso? No, hombre, aquí no llegará a tanto… Reflexiones mundanas y despreocupadas que demuestran una gran verdad: nadie escarmienta en cabeza ajena. Todo el mundo ha ido reaccionando a medida que le ha visto las orejitas al bichito. España en segundo lugar, detrás de Italia, y por supuesto una vez celebradas con fanfarria multitudinarias manifestaciones.

Las competiciones han ido cayendo una detrás de otra. No quedaba otra. Hasta la NBA, que no paró ni con las guerras mundiales. Época difícil que exigirá paciencia, mucha paciencia. Época de gran aburrimiento vital sin fútbol, que es de las primeras cosas cuando uno está sano. Época para recordar que entre tanta preocupación por esta caída mundial, esperemos que momentánea, los medios somos ahora más que nunca un lugar que frecuentar para recordar que fuera sigue el mundo, y que pronto se volverá a conectar. En medio de esta crisis que alguno seguro que aprovechará para engañarnos, en Muchodeporte seguiremos, faltaría más. La verdad, no encontrarán muchos mensajes idiotas ni noticias bobas del tipo "esta batalla la ganamos" o "entre todos lo vamos a conseguir".