Gracias, Etebo

Zona mixta

Rafael Pineda 23/02/2020

Oghenekaro Etebo es un futbolista nigeriano. Fue fichado en el pasado mercado invernal por el Getafe, donde llegó cedido por el Stoke City. Habrá aficionados que se acuerden del paso anterior de Etebo por el fútbol español. Jugó en la Unión Deportiva Las Palmas en la temporada 2017-18. El centrocampista jugó 14 partidos. Su equipo ganó uno, empató cuatro y perdió nueve. José Bordalás decidió alinearlo de inicio para refrescar a su equipo y dejar en el banquillo a Arambarri, un seguro de vida para el conjunto madrileño. Etebo estaba realizando un partido digno, aunque había dado alguna señal preocupante, como la amarilla que vio por una entrada a destiempo a Ocampos en el centro del campo. Etebo, que ya hacía cosas raras en Las Palmas, controló un balón en el borde del área de su equipo en el minuto 43. Lo que hizo a continuación no tiene nombre. Intentó una especie de regate y se cayó de forma lamentable. Reguilón aprovechó el regalo y asistió a Ocampos, que hizo el 0-1 a placer. 

La acción fue determinante en el importante triunfo del Sevilla. Lopetegui preparó el encuentro envuelto en sus ancestrales dudas, con el miedo metido en el cuerpo. Jugó, como siempre, a que no pasara nada. El Sevilla, para su bien, se encontró con Etebo. No habrá muchos Etebos más en la pelea apasionante por Europa que depara esta Liga. A Lopetegui, esta vez, le salió bien su apuesta, aunque, en honor a la verdad, el juego del Sevilla es manifiestamente mejorable. Me atrevería a afirmar, sin duda, que jugando de esta forma no llegará demasiado lejos. Hay algo intangible que ayuda al Sevilla. Y es que esa camiseta gana partidos. Además, hubo aspectos positivos en Getafe. El equipo hizo más faltas que un rival casi siempre intratable; De Jong no remata nunca pero cumple; Koundé de lateral y Navas de interior forman una magnífica banda derecha; Fernando es un gran futbolista y hasta pareció que Gudelj aportaba jugando como un líbero de principios de los 80 y a pesar de hacer falta en cada intento de anticiparse al rival. Ganó el Sevilla, en definitiva, para romper una crisis que empezaba a hacer mucho daño. Aunque Suso no cogiera una y con Bono de manera inesperada en la portería. No se gana todos los días por 0-3 en un campo como el del Getafe. Son siete los triunfos logrados fuera de casa y 23 los puntos obtenidos. Ahora queda progresar y hacer un mejor fútbol en Nervión para aspirar con entera firmeza a los puestos de Champions. Jugar a la nada es impropio de un entrenador de la talla de Lopetegui.