Top 5 de las decepciones de la temporada regular

Javier Márquez Mata 25/04/2019

Siempre que llega octubre hay equipos destinados a ciertas posiciones, y jugadores destinados a diferentes galardones. La NBA es un mundo, y como tal, cualquier parecido con los pronósticos hechos en octubre es una quimera. Tan quimera como que los Lakers del eterno en playoffs, LeBron James, este año se han quedado fuera por primera vez en 14 años. Otras decepciones son otras tantas franquicias que no han sido capaces de ganar 20 partidos en una liga de 82, o lo que es lo mismo, no han ganado ni una cuarta parte de los encuentros. Cavaliers, Knicks y Phoenix han tenido de las peores temporadas que se recuerdan, lo que significa un buen número en el draft, pero un suplicio para los asistentes a los pabellones, que ven perder a sus equipos sin parar.

En el quinto lugar y sorpresa menos decepcionante tenemos a los Washington Wizards. A principios de temporada se postulaban como uno de los equipos más fuertes del este, con la llegada de Dwight Howard una antigua estrella de la liga que parecía estar resurgiendo en Charlotte ¿El resultado? Media plantilla lesionada y el equipo jugando por llevarse el mejor pick posible en la lotería.

John Wall, tras alcanzar el mejor momento de la temporada, cayó lesionado hasta dentro de un año, por lo que parece ser que no volverá a jugar más con el equipo de la capital. Bradley Beal, con la capa de superestrella puesta, parece difícil que renueve su contrato a falta de un movimiento en verano que le haga cambiar su opinión. Otro año así y el equipo capitalino tendrá que iniciar un duro proceso de reconstrucción.

En el cuarto puesto encontramos a los Cleveland Cavaliers. Quizás el único motivo para no estar en el tercer puesto es la marcha del “Rey”, LeBron James, quien tras cumplir su promesa y traer el primer título de la historia a su ciudad, Cleveland, hizo las maletas rumbo a Lakers. Uno de los mejores jugadores de la historia ha decidido marcharse, dejando un hueco que no se va a llenar en mucho tiempo, el hijo de Cleveland marchó y su ciudad se sumió en las tinieblas. Es la primera temporada de reconstrucción, aún es pronto, pero parece que los de Ohio tendrán que ser pacientes, al menos por un par de temporadas más.

La tercera mayor decepción de la temporada han sido los Phoenix Suns, bien es cierto que los de Arizona no tenían las cotas muy elevadas, teniendo en cuenta el proceso de reconstrucción que viven, pero aún así, sí que se esperaban más victorias, y, por supuesto, mejor juego.

Los Suns encontraron en Devin Booker el jugador sobre el que construir un equipo de nuevo que vuelva a competir. Al escolta se le ha añadido a Deandre Ayton, un pívot prometedor con el que forma una espectacular pareja, que va a dar mucho de qué hablar en los años venideros. Sin embargo, este ha sido una decepción, ya que la mejoría era evidente y no se ha dejado notar en la clasificación.

No corren buenos tiempos en Nueva York, y es que son la mayor decepción de la temporada, solamente superados por los Lakers. Los neoyorkinos han visto como su franquicia se hundía poco a poco, pero tras parecer tocar fondo, han entrado en una nueva dimensión. Los Knicks han sido este año los peores de la liga, pero no todo es nefasto. 

La franquicia de la gran manzana ha amasado una gran cantidad de dinero para el mercado de agentes libres y apunta alto en el draft, por lo que la siguiente temporada promete y mucho. La problemática reside en convencer a jugadores como Kevin Durant o Kyrie Irving de fichar por el último peor equipo de los 30. En manos de Phil Jackson y compañía queda el asunto.

Por último, la mayor decepción, donde nos encontramos a Los Angeles Lakers de LeBron James. Obviamente los angelinos han mejorado su récord respecto a la campaña pasada, pero, sin duda, es enormemente decepcionante no ver al alero de Akron jugar los playoffs esta temporada. Juntaron grades nombres veteranos alrededor del “Rey”, pero no ha sido suficiente.

El alero pidió otra superestrella para convertir al proyecto en un seguro, pero no se consiguió y, tras el fallido intento por Anthony Davis, la base joven del equipo estuvo viviendo semanas sin saber si serían traspasados, lo que dejó muy tocado a un equipo que tuvo que vivir 18 partidos sin LeBron y varios meses sin su base titular, Lonzo Ball. Los demás jóvenes tampoco ofrecieron su mejor versión y el fuerte comienzo decayó, hasta el punto de dejar al bueno de Bron sin jugar los últimos partidos de la temporada para darle descanso.

El año que viene se avecinan muchos cambios en la franquicia californiana, Luke Walton ya no entrenará a los Lakers (de hecho, ya ha firmado por Sacramento Kings), Magic Johnson ha dimitido de su cargo de jefe de operaciones de la entidad, aunque ayudará a convencer a algún agente libre. Y todo esto tras una única temporada. LeBron ha venido a ganar un título y, en ese sentido, parece que las cosas están empezando a cambiar.