Copa del Rey (2018/2019) > 1/16 de final. Vuelta

Algún sobresalto, pero todo controlado

Decir que el Betis no pasó apuros ante el Racing sería no ajustarse a la realidad. Los verdiblancos se pusieron por delante en el marcador, en ciertas fases manejaron el partido, pero este dignísimo Racing se agarró al partido con fe y buen fútbol. Jugaron los montañeses rápidos, precisos y asomándose al área de Joel Robles más de una vez y de dos con peligro. No parecieron un equipo de Segunda B. Desde luego si su nivel de juego en lo que resta de temporada es parecido a lo que se vio en el Villamarín, le esperan buenas cosas. Sólo fueron apeados de la eliminatoria el no encontrar el gol, la vitamina que todo lo mueve en el fútbol. Al final, sin ese tanto que haga creer, todo termina resultando vacío, una tarea imposible. Y efectivamente así fue gracias al gol de Jon Ander en propia puerta en la primera parte y a los otros tres que cayeron posteriormente.

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El Betis controló el encuentro, aunque no con una total autoridad. Con un once rarito, con Francis por la izquierda, con Barragán de central y Javi García en la medular, la pelota comenzó a correr por el césped del Villamarín sin inquietar demasiado al Racing. Sí estaba el Betis atento a todos los balones, fuerte en la pelota dividida. Desde luego no se olió la mandanga de la noche copera ante el Cádiz. Digamos que el equipo salió del vestuario y bien. Pero el Racing cuenta con buenos futbolistas y un par de veces sí que llevó el susto monumental a las gradas por medio de Jon Ander. No fueron dos ocasiones cualquiera, sino dos mano a mano que Joel Robles desactivó al tapar con acierto su portería. Nuevamente fue el balón parado lo que comenzó a decantar la eliminatoria. Tello lanzó fuerte un córner, la defensa racinguista flojeó y un remate en semifallo de Barragán se convirtió en gol gracias al toque hacia su portería de Jon Ander.

No estaba todo el pescado vendido. Al fin y al cabo, el Racing seguía necesitando dos goles para pasar la eliminatoria. De hecho, Enzo Lombardo amenazó con una gran jugada nada más comenzar la segunda parte. Su centro terminó con un despeje defectuoso de Feddal a córner. Ahí se acabó todo. Entre otras cosas, porque llegó la jugada clave, la del segundo gol, la del penalti que definitivamente trajo la tranquilidad. Que el Racing marcara tres goles… Transformó Sanabria y con el 2-0 el Villamarín lo vio claro. Hizo hasta la ola. Era un Betis ya con Lo Celso en el campo. El partido, abierto, con todo el panorama del campo, era ideal para el argentino. Se marcó buenas jugadas. Además, salió Sergio León y puso el tercero en la primera pelota que tocó. Y se gustó Lo Celso en el cuarto tanto. Rompió a Jordi Figueras con dos quiebros y la puso arriba. Al final la noche terminó muy agradable. No hubo fantasmas y poco a poco se va enderezando la mala trayectoria del principio. Otro frente ilusionante como la Copa sigue abierto. Y con ganas de ser muy protagonista.

Real Betis (4): Joel Robles; Barragán, Mandi, Javi García, Feddal, Tello; Kaptoum, Canales (Lo Celso, minuto 46), Francis (Joaquín, minuto 75), Inui; Sanabria (Sergio León, minuto 67).

Racing Santander (0): Iván Crespo; Buñuel, Gil, Jordi Figueras, Rulo; Rivero (De Vicente, minuto 61), Sergio Ruiz, César Díaz, Enzo Lombardo (Cayarga, minuto 71); Álvaro Cejudo (Hidalgo, minuto 61) y Jon Ander Pérez.

Goles: 1-0, minuto 32: Barragán. 2-0, minuto 58: Sanabria, de penalti. 3-0, minuto 69: Sergio León. 4-0, minuto 88: Lo Celso.

Árbitro: Estrada Fernández, catalán. Amarillas para Óscar Gil, Buñuel y Cayarga.

Lo Celso

Salió en la segunda parte y dejó muestras de su enorme calidad. Contribuyó a cerrar definitivamente la eliminatoria.

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